la opinión sobre la importancia clínica de la espina bífida oculta lumbar y sacra es diversa y contradictoria. Pybus (1) considera que esta es la forma más leve de espina bífida, y que por lo general es asintomática. West (2), en su trabajo en el Ejército, piensa que en el caso ordinario de incontinencia de orina en el adulto, la condición de espina bífida oculta debe ser ignorada, mientras que Peritz (3) afirma que el 68 por ciento de los adultos y el 55 por ciento de los niños con enuresis tienen espina bífida oculta., Wheeler (4), en mil radiografías de la región lumbar en adultos blancos, encontró un cierre imperfecto de los arcos vertebrales posteriores en el último lumbar presente en el 2,3%. Roederer y Lagrot (5) encontraron la deformidad de la primera lámina posterior Sacra en el 9.9 por ciento de cien casos en adultos, y determinaron que un tercio de mil casos donde se examinaron los huesos mostraron espina bífida oculta lumbosacra, y en un quinto de estos mil casos fue el primer Sacro involucrado., Es un hallazgo tan frecuente que ciertos observadores han sugerido que podría ser solo una variación de lo normal y no una anomalía. Esta actitud hacia el sujeto es, por lo tanto, tersamente expresada por Woltman (6): «Los Roentgenólogos creen que la espina bífida oculta es tan común que puede considerarse casi una variación normal que tiene poca o ninguna relación con la causa por la que el paciente es referido para el examen.»

el defecto de fusión de la laminæ posterior vertebral puede ser definido, distinto, y fácilmente interpretado como visualizado en el roentgenograma., Sin embargo, si bien puede parecer que hay un fallo de fusión de la lámina en la película, en la operación el arco vertebral puede ser encontrado para ser continuo y puede haber solo un fallo de calcificación; es decir, existe una anomalía de la estructura y no una morfología anormal. Las laminæ pueden ser de longitud normal, pero pueden no estar en el mismo plano. Esta deformidad en el caso individual puede no tener importancia clínica o puede en sí misma aplanar una porción del canal neural como para causar presión de la médula y síntomas nerviosos remotos., Al interpretar la película dudosa, una dirección defectuosa de una o ambas láminas puede permitir a uno sacar la conclusión de que existe una espina bífida oculta. Tales hallazgos, ya sea una estructura ósea anormal o un defecto en la dirección de la laminae, son verdaderamente problemas de desarrollo que, si bien pueden limitarse a la anormalidad ósea solamente, pueden influir en el suministro de nervios a órganos remotos.

en la interpretación de un supuesto defecto em-briológico en la lámina posterior lumbosacra en el niño, se debe tener especial cuidado.

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