El trabajo, los problemas económicos, las obligaciones, las relaciones afectivas… Todo estas dimensiones exigen mucho de nosotros y en ocasiones, perdemos el control., Cuando la vida más deprisa que la mente puede aparecer la ansiedad nerviosa o el trastorno de ansiedad generalizada que, tal y como asegura esta investigación realizada por la Clínica Mayo, se caracteriza por la inquietud, los pensamientos obsesivos y determinados síntomas fisiológicos que dificulta el ritmo de nuestra vida.
Hay muchos mecanismos para manejar este estado. A nuestro alcance tenemos adecuadas técnicas psicológicas e incluso el Mindfulness, muy adecuado para aprender a centrarnos en el aquí y ahora y conectar con las propias necesidades., No obstante, en esta ocasión queremos profundizar en los remedios naturales.
La naturaleza, siempre sabia, pone a nuestra disposición propuestas muy recomendables para gestionar mejor la ansiedad nerviosa. Veamos cómo.
Ansiedad nerviosa: ¿cuándo? ¿por qué?
Sentirnos ansiosos y nerviosos es algo muy común en estos tiempos. Si bien esto no significa que esté bien, lo cierto es que son frecuentes las consultas en relación a esta consecuencia de la vida contemporánea.,
Todas las personas tenemos problemas de diferentes índoles. Sin embargo, a algunas les afectan más que a otras y en diferentes grados. Los síntomas más habituales de la ansiedad nerviosa son:
- Insomnio, problemas para conciliar el sueño.
- Elevación de la presión arterial, taquicardia y palpitaciones. Así lo afirma este estudio realizado por la Biblioteca Nacional en Salud (Honduras).
- Tensión, irritabilidad, mal humor., Esto suele darse, sobre todo, durante los procesos de la menopausia, tal y como afirma esta investigación realizada por el Servicio Social de la Universidad de Sonora (México).
- Incapacidad para concentrarse, tomar decisiones o quedarse quietos.
- Sensación de hormigueo en las extremidades, respiración entrecortada, mareos y temblores, según asegura este estudio realizado por la Universidad Complutense de Madrid.
La ansiedad nerviosa es más frecuente en ciertas etapas de la vida.,
Aparece en el organismo como una reacción hacia un supuesto peligro; nos pone en estado de alerta, a la espera de una situación adversa y por eso no podemos descansar y nuestro corazón late a mil por hora.
En acontecimientos cotidianos como, por ejemplo, una entrevista de trabajo, un examen, la boda o una mudanza es normal sentirse ansioso o nervioso.
Sin embargo, cuando las presiones y problemas nos agobian continuamente podemos sufrir cuadros de ansiedad nerviosa más graves.
¿Quieres conocer más?, Lee: 5 estrategias personales para canalizar y aliviar la ansiedad en 15 días
Remedios naturales para reducir la ansiedad nerviosa
Respirar profundo, dormir una siesta o meditar pueden ser muy buenas opciones para calmarnos, lo sabemos. Sin embargo, tal y como nos explica la doctora Karen F. Vieira en el Nutrition Journal los remedios naturales, entendidos como esas plantas cuyos principios activos son conocidos y controlados, se alzan como un ayuda adecuada para combatir los estados de ansiedad y estrés.,
También podemos aprovechar las bondades de los remedios caseros que te contamos a continuación:
Té de melisa
Es muy eficaz para tratar la ansiedad y «bajar revoluciones” después de un día muy complicado. De hecho, estudios como el que podemos leer en la Revista Mediterránea de Nutrición, y que realizó la Universidad de Aviñón, Francia, nos señalan que la melisa es efectiva en el tratamiento de la ansiedad leve y el insomnio moderado.
Te recomendamos consumirlo por las noches para dormir mejor.,
Ingredientes
- 1 taza de agua (250 ml)
- 1 cucharada de melisa o toronjil (10 g)
Preparación
- Pon el agua en un cazo y calienta hasta que entre en ebullición.
- Retira del fuego y añade la melisa.
- Deja reposar unos minutos, filtra y bebe (si lo deseas, puedes endulzar con miel).
Infusión de milenrama
Esta hierba es un relajante natural y se puede conseguir en las casas naturistas., Sus beneficios (en roedores, eso sí) pueden observarse en este estudio realizado por la Kermanshah University of Medical Sciences (Iran).
Ingredientes
- 1 taza de agua (250 ml)
- 1 cucharada de milenrama (10 g)
Preparación
- Hierve el agua durante 3 minutos.
- Retira del fuego y añade la hierba
- Tapa y deja refrescar por 10 minutos.
- Cuela y bebe, si quieres, endulzado con miel.
- Consume dos veces al día durante un mes seguido.,
Té de lúpulo
Este remedio casero es eficaz para las personas que sienten ansiedad nerviosa y también episodios de atracones con comida. Así lo afirma este estudio de la Universidad de Extremadura (España). Lo máximo recomendable es 3 tazas al día cuando aparecen los síntomas.
Ingredientes
- ½ taza de agua (125 ml)
- 1 cucharadita de flores de lúpulo (5 g)
Preparación
- Hervir el agua y retirar a los 5 minutos de comenzar la ebullición.
- Añadir las flores de lúpulo y calentar otros 3 minutos.,
- Pasado ese tiempo dejar reposar 5 minutos.
- Colar y beber lo más caliente posible.
Batido caliente de manzana
Este licuado aporta todos los beneficios de la manzana y al mismo tiempo reconforta por beberse caliente. Sin embargo, no existen evidencias científicas suficientes que lo relacionen con el trastorno de ansiedad.
Ingredientes
- 2 manzanas
- ½ taza de agua (125 ml)
- 1 pizca de sal
Preparación
- Lavar y pelar las manzanas.,
- Picar y colocar en el vaso de la licuadora junto al agua.
- Procesar bien y echar en un cazo.
- Hervir 5 minutos y agregar la sal.
- Remover bien y consumir antes de que se enfríe.
Té de valeriana
La valeriana es una de las plantas más «famosas” para combatir la ansiedad nerviosa. A nuestro alcance tenemos este estudio de la Unidade Local de Saúde de Matosinhos (Portugal), donde se avala su efecto sedante, y su utilidad para tratar los estados de ansiedad., La raíz de esta planta es relajante si se consume antes de dormir. Así, es perfecta para evitar el insomnio o las pesadillas.
Ingredientes
- 1 taza de agua (250 ml)
- 1 cucharada de raíz de valeriana (10 g)
Preparación
- Coloca el agua y la raíz de valeriana en un cazo.
- Calienta hasta que hierva. Deja que se realice la decocción durante 5 minutos.
- Retira del fuego y deja reposar 5 minutos.
- Filtra, endulza al gusto y bebe de a sorbos.,
Visita este artículo: Cómo dormir mejor bebiendo valeriana
Té de lechuga
La lechuga es una planta con muchas propiedades relajantes. Por ejemplo, se usa para el baño del bebé cuando no duerme lo suficiente. Asimismo, estudios como el llevado a cabo en la Universidad de Alejandría, en Egipto, demuestran la efectividad del aceite de lechuga para favorecer el descanso nocturno.
De este modo, se consume como infusión ayuda a las personas con trastornos del sueño o nerviosismo.,
Ingredientes
- ½ cogollo de lechuga
- 4 tazas de agua (1 litro)
Preparación
- Lava bien las hojas de la lechuga y coloca en un cazo grande.
- Echa el agua y calienta hasta que hierva.
- Cocina 10 minutos, retira del fuego y deja que se enfríe.
- Filtra y bebe hasta 2 tazas por día (una de ellas por la noche).
Té de hierbas relajantes
Si el cuadro de ansiedad nerviosa es muy profundo prepara esta infusión que combina las principales hierbas calmantes.,
Se recomienda consumirla después de las comidas principales.
Ingredientes
- 2 cucharada de lavanda (20 g). Según este estudio realizado por la Western University of Health Sciences (California), es beneficiosa para tratar la ansiedad.
- 2 cucharada de valeriana (20 g)
- 2 cucharada de melisa (20 g). Acorde a esta investigación realizada por el Hospital Universitario de San Martino (Italia) y en apoyo a la mencionada en el primer remedio, puede disminuir los síntomas de la ansiedad y ayuda a conciliar el sueño.,
- 4 tazas de agua (1 litro)
Preparación
- En un recipiente echa todas las hierbas y mézclalas bien.
- Extrae 4 cucharadas (el resto se puede usar guardar cerrado para el otro día) y mezcla con el agua en un cazo.
- Calienta el agua y, una vez hierva, cocina durante 10 minutos.
- Cuela y bebe una taza cuando todavía esté caliente.
- Esta cantidad rinde 4 tazas, por lo que se puede preparar para 2 días y reservar en la nevera.,
No dudemos en incluir alguna de estas propuestas naturales en nuestro día a día para beneficiarnos de su efecto.